Descubre esta pasta de dientes coreana sabor natillas y convierte tu experiencia de limpieza dental en un momento muy dulce. Blanquea y fortalece el esmalte, previene la caries, cuida las encías y refresca el aliento, ¿qué más se puede pedir?
Ah, sí, que resulte tan deliciosa como una cucharada de natillas caseras, ¡ñam!
Toosty crea dentífricos eficaces y únicos, con sabores inesperados que te enamorarán. Si la rutina de higiene dental te resulta un poco aburrida, con esta pasta de dientes coreana sabor natillas se transformará en uno de tus momentos favoritos del día.
Lucir una sonrisa sana y radiante es fundamental, pero nadie ha dicho que para conseguirla no puedas vivir una experiencia sensorial alucinante. Las pastas de dientes de Toosty te ayudarán a mantener a raya las bacterias, al tiempo que refrescan el aliento y cuidan las encías.
Además, para que tus dientes se vean cada día más bonitos, incorpora unas increíbles propiedades blanqueantes y fortalecedoras del esmalte, que también lo protegen de la caries. ¡Un auténtico win-win!
Y por si fuera poco, presentan un packaging que las convierten en un auténtico objeto de diseño, del que querrás presumir y que se convertirá en la excusa perfecta para cuidar tu sonrisa.
Están disponibles en dos tamaños: de 80 g. y 50 g. Pero ¿por qué elegir? Llévate uno de cada y ten siempre a mano tu pasta de dientes de Toosty, tanto si estás en casa como si te vas de viaje o a comer fuera.
¿Te apetece probar otros sabores? Encuentra aquí otros productos de la marca o hazte con el Discovery Set y conócelos todos.
1. No te la tragues y enjuágate muy bien la boca.
2. En caso de que te provoque irritación en las encías o en la boca, interrumpe su uso y consulta a tu médico.
3. En caso de que lo utilicen menores de 6 años, asegúrate de que no se lo tragan. Si lo hiciesen, consulta a tu médico.
5. Mantenla fuera del alcance de los menores de 3 años.

Descubre esta pasta de dientes coreana sabor natillas y convierte tu experiencia de limpieza dental en un momento muy dulce. Blanquea y fortalece el esmalte, previene la caries, cuida las encías y refresca el aliento, ¿qué más se puede pedir?
Ah, sí, que resulte tan deliciosa como una cucharada de natillas caseras, ¡ñam!